hacha
e-mergencista experimentado
Cerca de la Avenida de América 03-09-2006
Un vertido de gas tóxico en un laboratorio intoxica a 26 personas en Madrid
Un vertido de gas tóxico registrado en un laboratorio "semiabandonado", ubicado en las proximidades de la madrileña Avenida de América, ha afectado de forma leve a 26 personas. El escape ya ha sido controlado.
El vertido se produjo a las 20.15 horas del domingo en un laboratorio situado en el número 36 de la calle Pintor Moreno Carbonero, donde se encontraba el bidón que contenía el gas tóxico y que, tras expandirse por causas que se desconocen, afectó a 17 monjas de una residencia anexa que pertenece a las Hermanas del Angel de la Guarda.
También resultaron intoxicados, con fuertes dolores de cabeza, mareos e irritación de ojos, cinco bomberos del Ayuntamiento de Madrid y cuatro policías municipales que intervinieron en la extracción y traslado del bidón.
El Samur
Se investigan las causas
Algunos vecinos del barrio habían manifestado su malestar hacia varios días al presentar irritación en los ojos y en la piel, sin causa aparente.
Los miembros del Samur trasladaron a todos los que sufrieron las consecuencias del escape a la residencia "La Guindalera", situada enfrente del lugar del suceso, hasta que se recuperaron de los síntomas que presentaban y se determinó el material que los había causado.
Fuentes del cuerpo de Bomberos precisaron que el producto expandido era ácido cianídrico, un material "tóxico y corrosivo, muy irritante para los ojos y para la piel", aunque no causó lesiones graves a los perjudicados porque el tiempo de exposición fue breve.
Los Bomberos, vestidos con equipos de protección completa, localizaron el gas en un bidón sin etiqueta con capacidad para treinta litros si bien no se ha precisado la cantidad que se vertió.
En el lugar del suceso se detectó que había más bidones, por lo que la situación de riesgo era aún mayor, según estas fuentes, y además se detectaron otros materiales tóxicos como óxido de etileno y cloro, probablemente fruto de la reacción química del ácido.
Como medida preventiva y hasta que se solventase la situación de riesgo, Emergencias 112 envío un mensaje a 241 abonados del servicio telefónico residentes en un área de 100 metros en torno al lugar del accidente, recomendando a los vecinos que mantuvieran las ventanas cerradas para evitar nuevas intoxicaciones.
La zona permaneció acordonada hasta las 00.45 horas en que el 112 avisó a los vecinos de que la situación se había normalizado y de que no sufrían ningún riesgo para su salud.
Se estén investigando las causas del accidente así como las responsabilidades que se puedan derivar para el propietario de la fábrica al encontrarse en situación de abandono material peligroso, informaron fuentes policiales.
Un vertido de gas tóxico en un laboratorio intoxica a 26 personas en Madrid
También resultaron intoxicados, con fuertes dolores de cabeza, mareos e irritación de ojos, cinco bomberos del Ayuntamiento de Madrid y cuatro policías municipales que intervinieron en la extracción y traslado del bidón.
El Samur
Algunos vecinos del barrio habían manifestado su malestar hacia varios días al presentar irritación en los ojos y en la piel, sin causa aparente.
Los miembros del Samur trasladaron a todos los que sufrieron las consecuencias del escape a la residencia "La Guindalera", situada enfrente del lugar del suceso, hasta que se recuperaron de los síntomas que presentaban y se determinó el material que los había causado.
Fuentes del cuerpo de Bomberos precisaron que el producto expandido era ácido cianídrico, un material "tóxico y corrosivo, muy irritante para los ojos y para la piel", aunque no causó lesiones graves a los perjudicados porque el tiempo de exposición fue breve.
Los Bomberos, vestidos con equipos de protección completa, localizaron el gas en un bidón sin etiqueta con capacidad para treinta litros si bien no se ha precisado la cantidad que se vertió.
En el lugar del suceso se detectó que había más bidones, por lo que la situación de riesgo era aún mayor, según estas fuentes, y además se detectaron otros materiales tóxicos como óxido de etileno y cloro, probablemente fruto de la reacción química del ácido.
Como medida preventiva y hasta que se solventase la situación de riesgo, Emergencias 112 envío un mensaje a 241 abonados del servicio telefónico residentes en un área de 100 metros en torno al lugar del accidente, recomendando a los vecinos que mantuvieran las ventanas cerradas para evitar nuevas intoxicaciones.
La zona permaneció acordonada hasta las 00.45 horas en que el 112 avisó a los vecinos de que la situación se había normalizado y de que no sufrían ningún riesgo para su salud.
Se estén investigando las causas del accidente así como las responsabilidades que se puedan derivar para el propietario de la fábrica al encontrarse en situación de abandono material peligroso, informaron fuentes policiales.