Mulder
e-mergencista experimentado
A veces es todo un dilema moral saber cúando hemos de colocarnos la mascarilla higiénica.
Cómo decía Pasteur se trata del "enemigo invisible" y por tanto muchas veces, el personal no facultativo, no sabemos cómo y cuándo poner o ponernos una mascarilla.
Hemos comentado en algunos foros parte de este tema, pero creo que es hora de hacerlo totalmente...
Valorar la infección de un paciente es algo laborioso y en el campo de la medicina extrahospitalaria casi imposible. Los principales parámetros a tener en cuenta son, que el paciente te lo atestigüe (o bien un familiar) sus condiciones de vida, su estado físico aparente (muchas infecciones se manifiestan en la piel), la fiebre y la tos acompañada o no de contenido sanguinoliento.
Todo un dato importante es saber la medicación que toma o cómo se encuentra, pero muchas veces o bien te lo oculta o bien el paciente viaja inconsciente, de este modo se ha universalizado la normativa de tratar a todo el mundo como posible infeccioso; pero el mundo médico es muy grande y existen miles de tipos de infecciones entre las que nos importan: Fácilmente transmisibles (E.Aureus, Tuberculosis, etc) y los de transmisión media/baja (VIH, VHB, etc.) el problema es que muchas veces unos llevan a los otros...
Los guantes son algo que nunca ha de faltar en nuestras manos por este principio, pero la pregunta es... nunca llevamos siempre puesta la mascarilla higiénica ¿por qué?. Hay muchas razones, una de ellas por ejemplo, se dice que el paciente cree que va más grave (esta es la primera cuestión a desarrollar).
Cuando tenemos la certeza de que un pacientes es... tuberculoso... por ejemplo, ¿le ponemos a él la mascarilla o nos la ponemos todos los componenetes? (segunda cuestión a desarrollar). Un secreto es que si necesita oxígeno, le ponemos las gafas nasales y sobre ellas la mascarilla higiénica... ¿lo hacemos, o nos preocupa que se multiplique la capacidad infecciosa? (tercera cuestión).
Sin duda toda una problemática digna de comentar, iré dándo más datos y preguntas con vuestras opiniones..
Gracias, un saludo.
Cómo decía Pasteur se trata del "enemigo invisible" y por tanto muchas veces, el personal no facultativo, no sabemos cómo y cuándo poner o ponernos una mascarilla.
Hemos comentado en algunos foros parte de este tema, pero creo que es hora de hacerlo totalmente...
Valorar la infección de un paciente es algo laborioso y en el campo de la medicina extrahospitalaria casi imposible. Los principales parámetros a tener en cuenta son, que el paciente te lo atestigüe (o bien un familiar) sus condiciones de vida, su estado físico aparente (muchas infecciones se manifiestan en la piel), la fiebre y la tos acompañada o no de contenido sanguinoliento.
Todo un dato importante es saber la medicación que toma o cómo se encuentra, pero muchas veces o bien te lo oculta o bien el paciente viaja inconsciente, de este modo se ha universalizado la normativa de tratar a todo el mundo como posible infeccioso; pero el mundo médico es muy grande y existen miles de tipos de infecciones entre las que nos importan: Fácilmente transmisibles (E.Aureus, Tuberculosis, etc) y los de transmisión media/baja (VIH, VHB, etc.) el problema es que muchas veces unos llevan a los otros...
Los guantes son algo que nunca ha de faltar en nuestras manos por este principio, pero la pregunta es... nunca llevamos siempre puesta la mascarilla higiénica ¿por qué?. Hay muchas razones, una de ellas por ejemplo, se dice que el paciente cree que va más grave (esta es la primera cuestión a desarrollar).
Cuando tenemos la certeza de que un pacientes es... tuberculoso... por ejemplo, ¿le ponemos a él la mascarilla o nos la ponemos todos los componenetes? (segunda cuestión a desarrollar). Un secreto es que si necesita oxígeno, le ponemos las gafas nasales y sobre ellas la mascarilla higiénica... ¿lo hacemos, o nos preocupa que se multiplique la capacidad infecciosa? (tercera cuestión).
Sin duda toda una problemática digna de comentar, iré dándo más datos y preguntas con vuestras opiniones..
Gracias, un saludo.