Posibles percances o "molestias" con los materiales de prevención.
Por ejemplo, las gafas de protección no se usan normalmente porque se escurren fácilmente con el sudor, en efecto, pero existen en el mercado gafas con fijadores que encajan y aseguran la estabilidad del puente nasal pase lo que pase (incluso con la lluvia). Muchas personas creen que no son de gran utilidad, pero como importante vía de acceso a nuestro organismo, la conjuntiva es de las más importantes y de las que menos sensanciones de "entrada" manifiesta.
Una gota de sangre proyectada hacia uno de nuestros ojos puede no ser percibida, pero eficazmente infecciosa, por eso sobreponer una barrera entre el paciente y el sanitario es un gesto de 2 segundos (ponerse las gafas) con una protección del tiempo que se requiera.
El casco, según muchos, no se usa por cuestión estadística, es decir, cabe una muy remota posibilidad de que algún objeto caiga sobre mi. en fecto, así es, pero por muy pequeña que sea, existe, y desgraciadamente si ocurre, es muy posible que no solo acabe con nuestras vidas o nos deje ampliamente perjudicados, sino que es muy posible también que con nuestra baja sea la vida del paciente la que se cuenta como perdida.
Los chalecos, son una necesidad. En la noche somos potencialmente objetos estacionados en una carretera, en al que si no nos hacemos ver, podemos convertirnos en parte de ella.
No solo es por lso coches que ajenos al accidente ocurrido en ese punto circulan a grandes velocidades a nuestro alrededor, sino para indicar la propia presencia a otros servicios de emergencia, no formar una cola inmensa de coches por su "obligación" a parar para ofrecer auxilio, etc.
Así, una larga lista de productos creados para satisfacer nuestras necesidades, sobre todo la más importante VIVIR.