TEM_112
e-mergencista experimentado
Un niño de tres años muere ahogado en Madrid tras caer a una fosa séptica08:21:26 - 12/12/2005Vocento VMT -El pozo estaba excavado en la finca familiar, en una zona residencial no urbanizada. Fue rescatado por sus allegados pero había tragado mucho agua.
Un niño de tres años murió ayer tras caer en un pozo en el término municipal de Brunete, en la zona conocida como Dehesa del Encinar, cercana a la carretera M-600 que une a este municipio con Villanueva de la Cañada.
Alrededor de la una de la tarde, el teléfono del servicio de Emergencia 112 recibió la llamada desesperada de los padres, alertando de que su hijo había caído en un pozo horadado en el suelo. El pequeño estaba jugando en el terreno que rodea el chalé donde reside la familia, vecina de Brunete. La familia no tardó en echarlo en falta y comenzaron una búsqueda desesperada. Finalmente lo encontraron en el fondo de un agujero excavado, al parecer, para el uso como pozo ciego. La Dehesa es una zona no urbanizada, poblada de chalés y fincas alejadas unas de otras por bastante distancia. Al carecer de alcantarillado, se usa este tipo de fosas sépticas en su lugar.
La leve profundidad del pozo permitió que sus familiares consiguieran sacarlo del fondo de aquel agujero. Sin embargo, había tragado bastante líquido y había dejado de respirar. La alarma de los padres movilizó en Emergencia 112 a un Vehículo de intervención rápida y un helicóptero del Summa, que acudieron rápidamente hasta el lugar, en el kilómetro 32 de la carretera M-600. Los sanitarios encontraron al pequeño con una parada cardiorrespiratoria y le aplicaron las técnicas llamadas «de resurrección» especiales para niños de tan corta edad. Consiguieron devolverle el pulso y la respiración, pero se encontraba en un estado muy grave.
Inmediatamente lo trasladaron por aire al Hospital Clínico San Carlos de Madrid, donde fue ingresado con pronóstico muy grave. El helicóptero tuvo que aterrizar en la sede de la Presidencia del Gobierno en Moncloa, donde le esperaba una UVI móvil. Aunque estabilizado por los servicios de Emergencia, el pequeño falleció cuando llegó al hospital. Al parecer, la principal lesión sufrida fue provocada por el ahogamiento y por las consecuencias de la parada cardiorrespiratoria que éste le causó. No obstante podría haber recibido heridas más graves en la caída, informaron fuentes de Emergencia 112. Las causas, sin embargo siguen pendientes de la autopsia que se realizará hoy.
Un niño de tres años murió ayer tras caer en un pozo en el término municipal de Brunete, en la zona conocida como Dehesa del Encinar, cercana a la carretera M-600 que une a este municipio con Villanueva de la Cañada.
Alrededor de la una de la tarde, el teléfono del servicio de Emergencia 112 recibió la llamada desesperada de los padres, alertando de que su hijo había caído en un pozo horadado en el suelo. El pequeño estaba jugando en el terreno que rodea el chalé donde reside la familia, vecina de Brunete. La familia no tardó en echarlo en falta y comenzaron una búsqueda desesperada. Finalmente lo encontraron en el fondo de un agujero excavado, al parecer, para el uso como pozo ciego. La Dehesa es una zona no urbanizada, poblada de chalés y fincas alejadas unas de otras por bastante distancia. Al carecer de alcantarillado, se usa este tipo de fosas sépticas en su lugar.
La leve profundidad del pozo permitió que sus familiares consiguieran sacarlo del fondo de aquel agujero. Sin embargo, había tragado bastante líquido y había dejado de respirar. La alarma de los padres movilizó en Emergencia 112 a un Vehículo de intervención rápida y un helicóptero del Summa, que acudieron rápidamente hasta el lugar, en el kilómetro 32 de la carretera M-600. Los sanitarios encontraron al pequeño con una parada cardiorrespiratoria y le aplicaron las técnicas llamadas «de resurrección» especiales para niños de tan corta edad. Consiguieron devolverle el pulso y la respiración, pero se encontraba en un estado muy grave.
Inmediatamente lo trasladaron por aire al Hospital Clínico San Carlos de Madrid, donde fue ingresado con pronóstico muy grave. El helicóptero tuvo que aterrizar en la sede de la Presidencia del Gobierno en Moncloa, donde le esperaba una UVI móvil. Aunque estabilizado por los servicios de Emergencia, el pequeño falleció cuando llegó al hospital. Al parecer, la principal lesión sufrida fue provocada por el ahogamiento y por las consecuencias de la parada cardiorrespiratoria que éste le causó. No obstante podría haber recibido heridas más graves en la caída, informaron fuentes de Emergencia 112. Las causas, sin embargo siguen pendientes de la autopsia que se realizará hoy.