Dependiendo del tipo de desastre y salvo una fase muy precoz de la atención a las catástrofes, la atención médica en catástrofes no tiene mucho que ver con las emergencias y sí mucho con atención primaria. Lo que la hace distinta en esas fases más avanzadas es la importancia que tiene en su desempeño la logística y la coordinación con otras organizaciones e instituciones.
En un primer momento el rescate y la atención a traumas requieren que a ser posible las unidades tengan capacidad quirúrgica. Pero a partir de entonces lo que hay es población con patología común (siguen teniendo enfermedades crónicas, hipertensión, convulsiones, resfriados) y otra patología derivada de las condiciones más o menos insalubres del lugar: diarreas y enfermedades respiratorias, muchas en relación con el hacinamiento y la falta de medidas higiénicas. En esta "medicina" las medidas que salvan vidas son las que se basan en la "salud pública" más que en las medicinas y en la ayuda espectacular y televisiva: potabilización de agua, mejora de los accesos para la llegada de víveres y material etc. De modo que, en el fondo, es una Medicina que suelen poder aplicar los recursos del regionales (paises y comunidades vecinas) y locales (una vez que ha pasado la fase de "aturdimiento" y reorganización del sistema) por supuesto con el soporte del exterior. Esta es la línea que intentan seguir las instituciones como OMS.
La tendencia de los paises que envían ayuda humanitaria es a enviar recursos inadecuados: material de emergencias cuando lo que necesitan es tratamientos para la diarrea, inyectables cuando la vía oral es la preferida, antibióticos modernos cuando su sistema médico sigue utilizando antiguos, etc. A menudo creamos necesidades que no tenían antes de nuestra llegada. Atenerse, por ejemplo, al listado de fármacos esenciales de la OMS puede ayudar.
Lo que hace distinta esta "Atención Primaria de Emergencia" si se le puede llamar así es:
1 que requiere un soporte logísitico excepcional
2 que se practica en unas condiciones adversas
Los protocolos y modos de actuar no pueden ser los mismos de siempre: si lavas las heridas como estás acostumbrado, si atiendes los resfriados como mandan los canones de tu área... al segundo día has acabado tus reservas de antisépticos, gasas, antibióticos, etc.
La atención debe ser austera pero digna y promoviendo la autosuficiencia y no la dependencia.
Pero sigo pensando que muchas veces nuestra ayuda tiene más que ver con nuestras necesidades (de vivir experiencias, de estar ahí, de demostrar solidaridad) que con las suyas. Muchas veces, no siempre...