ARAGÓN, UNA DE LAS COMUNIDADES PARTICIPANTES
Programa educativo para atender infartos
Se enseñará a la población las técnicas de soporte vital básico.
EL PERIÓDICO (26/01/2006)
Aragón participa en un novedoso programa, el Plan Salvavidas, a través del cual se enseñarán las técnicas del soporte vital básico a la población en general, para poder ayudar en un primer momento a personas con paradas cardiorrespiratorias hasta la llegada de personal sanitario. Esta iniciativa, que comenzará con la formación de los monitores, fue presentada ayer por la Sociedad Española de Medicina General.
Aunque va dirigido a la población en general, los primeros beneficiados del plan serán aquellas personas que tienen más posibilidades de presenciar una parada cardiaca, como familiares de enfermos, policías, bomberos, profesorado de centros educativos, alumnos de institutos y personas que trabajen en centros públicos.
En la presentación, los médicos destacaron la necesidad de que haya desfibriladores semiautomáticos en lugares con una afluencia masiva de público, como estadios de fútbol o grandes centros comerciales, para poder atender a infartados.
Programa educativo para atender infartos
Se enseñará a la población las técnicas de soporte vital básico.
EL PERIÓDICO (26/01/2006)
Aragón participa en un novedoso programa, el Plan Salvavidas, a través del cual se enseñarán las técnicas del soporte vital básico a la población en general, para poder ayudar en un primer momento a personas con paradas cardiorrespiratorias hasta la llegada de personal sanitario. Esta iniciativa, que comenzará con la formación de los monitores, fue presentada ayer por la Sociedad Española de Medicina General.
Aunque va dirigido a la población en general, los primeros beneficiados del plan serán aquellas personas que tienen más posibilidades de presenciar una parada cardiaca, como familiares de enfermos, policías, bomberos, profesorado de centros educativos, alumnos de institutos y personas que trabajen en centros públicos.
En la presentación, los médicos destacaron la necesidad de que haya desfibriladores semiautomáticos en lugares con una afluencia masiva de público, como estadios de fútbol o grandes centros comerciales, para poder atender a infartados.