Su coche fue embestido por otro vehículo el pasado 31 de diciembre en la incorporación de la antigua carretera de Ocaña. Cuatro personas más resultaron heridas con pronóstico leve
último día de 2005 se saldó con un accidente mortal a la altura del kilómetro 1 de la N-400 en dirección a Toledo, pasado el puente cercano a los talleres municipales, poco antes de llegar al centro comercial Luz del Tajo. Como resultado de la colisión entre dos vehículos poco después de las 13,30 horas de la tarde falleció una joven conductora y otras cuatro personas fueron trasladadas al Hospital Virgen de la Salud con pronóstico leve -contusiones diversas y traumatismos torácicos-, siendo dadas de alta poco después.
La víctima iba al volante de un turismo cuando se vio sorprendida, a la altura de la incorporación de la antigua carretera de Ocaña, por otro vehículo que la embistió. Tras dar una vuelta de campana, su coche impactó violentamente contra el quitamiedos, que quedó prácticamente arrancado de su sitio, y también contra una farola.
Acudieron al lugar del suceso dos ambulancias convencionales y una UVI de Toledo, aunque no fue posible salvar la vida de la conductora (la persona que la acompañaba fue uno de los heridos). La llamada fue registrada por el 112 pocos minutos antes de las 14,00 horas de la tarde. Según los testimonios de los bomberos, la víctima recibió un severo impacto en la cara que el airbag no pudo contener. Policía Local, Guardia Civil, Bomberos de Toledo y efectivos de Mantenimiento de Carreteras también acudieron al lugar de los hechos, permaneciendo allí por espacio de un par de horas.
Al parecer, también estuvieron presentes en el lugar del siniestro algunos familiares de la fallecida.
Jornada agitada. El último día de 2005 sorprendió a los bomberos del Parque Municipal -en mitad de unas reivindicaciones relacionadas con la organización de su cuadrante anual- con otras tres salidas. En primer lugar, un fuego de vivienda en el interior de una casa de la calle San Ildefonso. Por otra parte, la caída de un muro en la subida a San Jerónimo obligó a la intervención de estos efectivos y por último, en el Plegadero, un hombre de edad avanzada recibió un golpe en la cabeza de cierta consideración
último día de 2005 se saldó con un accidente mortal a la altura del kilómetro 1 de la N-400 en dirección a Toledo, pasado el puente cercano a los talleres municipales, poco antes de llegar al centro comercial Luz del Tajo. Como resultado de la colisión entre dos vehículos poco después de las 13,30 horas de la tarde falleció una joven conductora y otras cuatro personas fueron trasladadas al Hospital Virgen de la Salud con pronóstico leve -contusiones diversas y traumatismos torácicos-, siendo dadas de alta poco después.
La víctima iba al volante de un turismo cuando se vio sorprendida, a la altura de la incorporación de la antigua carretera de Ocaña, por otro vehículo que la embistió. Tras dar una vuelta de campana, su coche impactó violentamente contra el quitamiedos, que quedó prácticamente arrancado de su sitio, y también contra una farola.
Acudieron al lugar del suceso dos ambulancias convencionales y una UVI de Toledo, aunque no fue posible salvar la vida de la conductora (la persona que la acompañaba fue uno de los heridos). La llamada fue registrada por el 112 pocos minutos antes de las 14,00 horas de la tarde. Según los testimonios de los bomberos, la víctima recibió un severo impacto en la cara que el airbag no pudo contener. Policía Local, Guardia Civil, Bomberos de Toledo y efectivos de Mantenimiento de Carreteras también acudieron al lugar de los hechos, permaneciendo allí por espacio de un par de horas.
Al parecer, también estuvieron presentes en el lugar del siniestro algunos familiares de la fallecida.
Jornada agitada. El último día de 2005 sorprendió a los bomberos del Parque Municipal -en mitad de unas reivindicaciones relacionadas con la organización de su cuadrante anual- con otras tres salidas. En primer lugar, un fuego de vivienda en el interior de una casa de la calle San Ildefonso. Por otra parte, la caída de un muro en la subida a San Jerónimo obligó a la intervención de estos efectivos y por último, en el Plegadero, un hombre de edad avanzada recibió un golpe en la cabeza de cierta consideración