Muere un hombre tras la tardanza del 112

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Esta es una noticia publicada el Lunes dia 22 de Agosto.

SALAMANCA
Los vecinos de Robleda se movilizan por la muerte de un hombre tras la tardanza del 112
La víctima murió por un infarto de miocardio y el helicóptero de emergencias tardó dos horas

Un hombre de 49 años falleció a las diez de la mañana de ayer a causa de un infarto de miocardio en la localidad salmantina de Agallas. Su familia intentó ponerse en contacto con el centro de salud de Robleda, a 20 kilómetros del municipio, pero el teléfono del centro no funcionaba. Posteriormente, llamaron al Servicio de Emergencias 112, pero el helicóptero tardó dos horas en llegar a l lugar de los hechos. El hombre, en ese tiempo, había fallecido. A partir de ese momento, los vecinos de la localidad comenzaron una manifestación popular improvisada que fue pasando y reuniendo a los vecinos de doce municipios de la comarca: Agallas, Martiago, El sahugo, Vega de Domingorrey, Villarejo, Hermijuela, Pastores, La Encina, Villarubias y Robleda.

En total, unas seiscientas personas se reunieron en la puerta del centro de salud de Robleda para exigir más efectivos sanitarios. Posteriormente, la manifestación se dirigió a la carretera C-526 que une Ciudad Rodrigo y Cáceres que fue cortada durante más de una hora.

El alcalde de Robleda, Juan Francisco Mateo manifestó que buscan «soluciones, porque el centro sanitario los fines de semana se queda solo con un médico y una enfermera, insuficientes para atender a una población que en verano se triplica superando los 1.200 habitantes».

Los alcaldes de los municipios afectados tienen previsto reunirse hoy mismo para solicitar una entrevista con los responsables de la Junta de Castilla y León para exigir más efectivos sanitarios en la zona, porque «así no nos podemos quedar», afirmaba Mateo.
 
Nota Publicada el Martes día 23 de Agosto.

SALAMANCA
La Junta abre una investigación para aclarar la muerte de un hombre en Agallas el domingo

La Consejería de Sanidad anunció ayer la apertura de una investigación para aclarar los hechos ocurridos el pasado domingo en la localidad salmantina de Agallas.

El gerente de Salud de Área de Salamanca, Ricardo García Juan, señaló que la investigación se va a centrar precisamente en lo ocurrido en el Centro de Atención Continuada de Robleda, a unos veinte kilómetros de Agallas, al entenderse desde la Junta que la respuesta a la emergencia realizada desde el 112 fue «en todo momento correcta».

A pesar de las quejas reiteradas de los vecinos y de los propios profesionales del Centro de Robleda, el gerente de Salud de Área señaló que «teníamos la certeza de que el teléfono estaba funcionado» y destacó que la última revisión de la línea se efectuó el pasado 14 de agosto. En cualquier caso, la Gerencia se puso ayer en contacto con la empresa Telefónica para comenzar las averiguaciones y se espera que en los próximos días se remita a la Junta de Castilla y León el informe por escrito de lo ocurrido.

A pesar de los problemas con la línea telefónica, la Junta insiste en que la atención sanitaria a la comarca de El Rebollar, en la que se encuentran Agallas y Robleda, es «suficiente» y se califica lo sucedido como «un hecho puntual». Una situación en la que un médico y una enfermera son el retén de guardia para una población inferior a los 2.000 habitantes pero repartida en doce núcleos.

Ricardo García Juan, gerente de Salud de Área, subrayó que la «asistencia es de buena calidad» y destacó que la demanda de atenciones en la zona «es muy baja» -con una media de cinco en los días laborales y once en los festivos-, señalando que «no se pueden tener recursos por si acaso».

Asimismo, la Junta insiste en la respuesta «conveniente» realizada desde el 112. Según los datos oficiales aportados ayer por el delegado de la Junta en funciones, Luis Heredero, el infarto debió producirse pasadas las diez de la mañana. Los familiares habrían comenzado en ese momento a llamar al centro sanitario de Robleda sin obtener respuesta y a las 10:47 efectuaron la llamada al 112.

Según consta en el informe oficial, a las 10:55 se actuó el operativo de urgencia y se movilizó al helicóptero del servicio que llegó al punto de destino a las 11:25. Paralelamente, y tras haber intentado también sin éxito contactar telefónicamente con el centro de Robleda, se envió un fax al personal de guardia a las 11:00. El médico y la enfermera habrían salido de Robleda a las 11:10 y llegaron hasta el domicilio de la víctima en Agallas pasadas las 11:35. Allí entubaron y trataron de reanimar al paciente, pero finalmente falleció. Una muerte que llenó de indignación a los vecinos de la zona, que cortaron en señal de protesta la carretera comarcal que une Ciudad Rodrigo con Cáceres.

El delegado de la Junta en funciones insistió ayer que, al contrario de como actuaron los familiares del fallecido, la primera llamada en caso de emergencia debe realizarse al centro operativo de emergencias del 112 «que puede poner en marcha otros recursos cuando, como ocurrió el domingo en Robleda, los medios más cercanos no están disponibles».
 
dos muertos por falta de asistencia en una semana

EL ADELANTO DE SALAMANCA. 29/08/05

Los ciudadanos exigen a Sacyl que aclare los fallos en la atención del 112


La federación de usuarios cree "alarmante" que no exista atención médica en casos de gravedad


La entidad pedirá responsabilidades sobre las emergencias a las que no acudió el servicio


OLGA PRIETO 29/08/2005




La coincidencia de dos casos similares en menos de una semana han incrementado el malestar y la inquietud ante la posibilidad de que los fallos en la cobertura de las emergencias sanitarias por parte del servicio 112 superen el margen de lo circunstancial. Pasados ocho días desde el suceso ocurrido en Agallas el 21 de agosto, desde distintos sectores de la provincia se intensificaron ayer las exigencias a la Administración autonómica, después de que un hombre falleciera el pasado viernes en un bar de la capital salmantina sin recibir asistencia de los equipos de emergencias de Sacyl.

Así, desde la Federación de Consumidores y Usuarios de Salamanca, Víctor Pedraz manifestó su preocupación por lo sucedido, asegurando que estos hechos ponen de manifiesto "que se están detectando fallos, no sé si por la gestión de la atención de urgencias o porque no hay personal suficiente". En todo caso, anunció que, como colectivo de usuarios, la entidad va a remitir un escrito al gerente de Salud de Area, Ricardo García Juan, "para pedirle que nos explique qué está ocurriendo y qué medidas están tomando para resolver estos problemas".


EN LA CIUDAD En su opinión, es "alarmante" que no llegue la asistencia médica "en un momento de gravedad, teniendo en cuenta que, en este tipo de casos, una atención rápida podría salvar vidas", por lo que estos episodios son "abrumadores, y se han producido dos en una semana, uno de ellos en la misma ciudad". Por su parte, el portavoz socialista en el Ayuntamiento de Salamanca, Fernando Pablos, destacó ayer que su partido "quiere saber cuántas ambulancias estaban operativas en la jornada del viernes", recordando que los dispositivos de emergencia tienen que ofrecer "los mismos servicios y la misma cobertura durante todo el año", incluso en la época estival.

Además, aseguró que el PSOE "pedirá responsabilidades y exigirá que se corrijan los posibles errores existentes para que no se vuelvan a repetir situaciones tan lamentables". A este respecto, Fernando Pablos insistió en que la Consejería de Sanidad "debe garantizar en todo momento" el servicio y la disponibilidad de los recursos adecuados.

Para ello, añadió, debe habilitar los dispositivos necesarios, "aunque sea con medios ajenos, porque en Salamanca viven decenas de miles de personas, y no puede ser que estén desprotegidas". Mientras, responsables políticos del Partido Popular de Salamanca rechazaron realizar declaraciones sobre lo sucedido el viernes, y se remitieron a las explicaciones oficiales, recordando que las competencias en esta materia son de la Consejería de Presidencia.
 
TRIBUNA DE SALAMANCA. 29/08/05

Sanidad. Atención de Urgencias
El 112 asegura que su dispositivo estuvo activo durante 17 minutos
El 112 aseguró ayer que el dispositivo sanitario estuvo activo durante 17 minutos, entre la recepción de la llamada de aviso y la desactivación del mismo, durante el fallecimiento de un hombre en un restaurante de la calle Ayala.
A. M. R.

Los testimonios directos del fallecimiento elevaron el día anterior el retraso de la asistencia médica a media hora. «En estos casos de extrema gravedad, un minuto pueden parecer treinta», razonaron fuentes de la Junta consultadas ayer. Según un comunicado del 112, a las 21.37 horas del viernes, Castilla y León 112 recibió una llamada de teléfono de la empresa Securitas Direct, procedente de Madrid e informando de la necesidad de asistencia sanitaria de una persona en un restaurante. Inmediatamente, prosigue el texto, un operador llamó al restaurante para obtener información de la emergencia.

A las 21.39 horas, Castilla y León 112 deriva el caso a Emergencias Sanitarias de Sacyl. A las 21.43, Sacyl –Sanidad de Castilla y León– clasificó el incidente como prioridad uno y activó dos recursos: la unidad móvil de emergencias que se encontraba en ese momento atendiendo otra emergencia por un accidente de tráfico en la Nacional 620, una ambulancia equipada con soporte vital básico y al personal del punto de atención continuada de La Alamedilla.

A las 21.54 horas, continúa el comunicado oficial, el conductor de otra ambulancia concertada con Sacyl comunicó que se hace cargo del paciente para su traslado al complejo hospitalario de Salamanca, de lo que se informa a Castilla y León 112 y se procedió a la desactivación de los recursos sanitarios.

El testimonio del 112 resalta que la llamada se recibió de la centralita de una compañía de seguridad –Securitas Direct– y no del restaurante directamente donde se produjo el suceso. Asimismo, resalta que movilizó dos vehículos para cubrir esta asistencia y que no llegaron a su destino porque el paciente ya había sido trasladado al Clínico.

El día anterior, fuentes cercanas al caso confirmaron a este diario que la ambulancia equipada con UVI permaneció en el accidente de la N-620, a la altura de la urbanización de La Rad, porque había heridos en apariencia grave y el servicio se vio imposibilitado para atender la otra.
 
el 112 en salamanca hace aguas

el adelanto de salamanca 30/08/05


Deficiencias sanitarias en la provincia

Numerosas denuncias confirman las demoras en las actuaciones del 112


Dos ambulancias llegaron con retraso a la misma urgencia en un salón de belleza el pasado día 19


Otras dos personas intentaron sin éxito reanimar a un vecino ante la tardanza de los facultativos


NACHO G. 30/08/2005

Después de que en la misma semana dos personas fallecieran de un infarto sin que los servicios de emergencia de Sacyl llegaran a tiempo de practicar la resucitación cardiorrespiratoria, se ha abierto la espita de las denuncias ciudadanas, que acusan directamente al 112 de sufrir continuos retrasos en las urgencias que asisten.

Así, el pasado día 19 una mujer de 60 años que estaba de vacaciones en la capital del Tormes sufrió un desfallecimiento en un salón de belleza situado en la plaza de Madrid. Inmediatamente, las personas que allí estaban llamaron al 112 solicitando una ambulancia con urgencia, debido a que la señora no reaccionaba. Pasados unos minutos, el vehículo medicalizado seguía sin presentarse en el lugar de los hechos, por lo que las empleadas del negocio decidieron llamar a otra ambulancia.

Tras una tensa espera, se presentaron al mismo tiempo los dos vehículos sanitarios solicitados, aunque ya era demasiado tarde: la mujer, cuyas iniciales eran E. S. C., había entrado en coma como consecuencia de un derrame cerebral. Seis días después, la señora, que residía en Canarias, fallecía en el hospital Clínico de Salamanca.


RETRASO EN PIZARRALES Otro caso relacionado con los retrasos del Servicio de Emergencias de Sacyl sucedió hace poco más de dos meses en el barrio de Pizarrales. Allí, un varón de 45 años --con antecedentes cardiacos-- sufrió un infarto mientras estaba en casa. Enseguida, su familia avisó a urgencias para que mandaran de inmediato una ambulancia. Poco después, volvieron a llamar a emergencias, pero la ambulancia seguía sin aparecer. Varios vecinos, alarmados por los gritos que provenían del piso donde se desarrollaban los hechos, decidieron avisar de nuevo al 112 para reclamar la ambulancia y, de paso, solicitar información sobre cómo actuar mientras no llegaban los sanitarios. Así, desde el número de urgencias explicaron a una de las vecinas cómo realizar la resucitación cardiopulmonar para intentar estabilizar al infartado. Tras el cursillo acelerado de primeros auxilios, dos personas trataron de reanimar al enfermo, pero éste no respondía a los masajes. Entonces, casi 20 minutos después de la primera llamada de socorro, llegaron los sanitarios, que enseguida comenzaron los ejercicios de resucitación pulmonar. Pero ya era demasiado tarde. Allí mismo los servicios de emergencias certificaron la muerte del hombre.
 
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