Isaac_sevilla
e-mergencista experimentado
Carlos Santos, un chileno de 28 años, no creía en los riesgos de una ingesta excesiva de alcohol y aceptó la apuesta de un amigo.
En medio de una reunión se tomó de un solo trago una botella de pisco, una bebida típica de alta graduación que se destila de la uva.
El joven ganó la apuesta en sólo diez segundos y desató los gritos de los asistentes a la fiesta, celebrada en la ciudad de San Felipe, a 70 kilómetros al norte de Santiago, la capital.
Sin embargo, la hazaña culminó con la muerte del bebedor, que sufrió justo después un coma etílico, según indicaron los informes médicos.
La botella que el joven bebió de un trago contenía 750 centilitros de esta especie de aguardiente que se produce en Chile y en Perú, con un nivel alcohólico de 35 grados.
En medio de una reunión se tomó de un solo trago una botella de pisco, una bebida típica de alta graduación que se destila de la uva.
El joven ganó la apuesta en sólo diez segundos y desató los gritos de los asistentes a la fiesta, celebrada en la ciudad de San Felipe, a 70 kilómetros al norte de Santiago, la capital.
Sin embargo, la hazaña culminó con la muerte del bebedor, que sufrió justo después un coma etílico, según indicaron los informes médicos.
La botella que el joven bebió de un trago contenía 750 centilitros de esta especie de aguardiente que se produce en Chile y en Perú, con un nivel alcohólico de 35 grados.