Se ha visto que esta técnica genera flujos casi normales en corazón y cerebro. Pero para que sea efectivo debe realizarse tras el fracaso inicial de la RCP y antes de los primeros 25 minutos de PCR. Aunque parezca que es una técnica de uso exclusivamente intrahospitalario existen trabajos que demuestran que puede ejecutarse fuera del hospital sin complicaciones añadidas. Se están diseñando equipos de minitoracotomía para realizar esta técnica a nivel extrahospitalario, con un menor grado de agresividad quirúrgica. La principal y más efectiva indicación es en el PCR por traumatismo torácico penetrante. Añadir que una vez realizada la toracotomía de emergencia, se pueden realizar técnicas que mejoran la supervivencia, tales como control directo de vasos sangrantes o clampaje de aorta descendente para controlar hemorragias infradiafragmáticas y derivar sangre a órganos vitales (corazón, pulmón, cerebro).