Alpe62
e-mergencista experimentado
El 112 tardó 14 minutos en avisar a la Policía en un simulacro de bomba
02/04/2006
FERNANDO PÉREZ ÁVILA
© Diario de Sevilla
El servicio de emergencias 112 tardó 14 minutos en avisar a la Policía Local en un simulacro de atentado terrorista en el apeadero de Renfe junto al Hospital Virgen del Rocío el pasado día 22 de febrero. Los agentes de la fuerza municipal de seguridad recibieron el aviso a las 10.53 de esta jornada, mientras que la llamada realizada por los operarios de Renfe –cuya delegación de Protección Civil y Seguridad organizaba el simulacro– consta en la sala del 112 a las 10.39, según un informe de la Policía Local al que ha tenido acceso este periódico.
La Policía Nacional llegó al lugar del simulacro en torno a las once de la mañana y no acudieron unidades ni de los Bomberos ni los técnicos de emergencias sanitarias del 061. Finalmente fueron los trabajadores de Renfe los que inspeccionaron las vías férreas y desalojaron el apeadero, ante la tardanza del resto de los servicios.
Los responsables de los distintos cuerpos de seguridad y de emergencias habían sido avisados días antes de la celebración del simulacro, que consistía en la supuesta colocación de una bomba en los aseos del apeadero. La hora en la que se detectaría el artefacto sería las 10.15 y era conocida de antemano por el personal que participaría en el simulacro. De ahí que la Policía Local y los Bomberos esperaran el aviso desde un punto muy próximo, la glorieta de entrada a la avenida Manuel Fal Conde.
El trabajo de la fuerza municipal de seguridad en este dispositivo se limitaría a la presencia en la zona de un único patrullero, que se dedicaría a estudiar los cortes de tráfico en los accesos a la estación ferroviaria y que orientaría al resto de unidades que serían enviadas en caso de que la amenaza fuera cierta. El simulacro serviría además para evaluar la rapidez de respuesta entre la recepción de la llamada y la llegada al lugar de los hechos por parte de los policías.
El personal de seguridad de Renfe efectuó la llamada al teléfono de emergencias de la Junta 112 –que gestiona los avisos a la Policía Local desde hace año y medio– a las 10.39. Sin embargo, la sala de la Policía Local no recibió el aviso del 112 hasta 14 minutos después. Los agentes de este cuerpo fueron además los primeros en llegar al escenario del simulacro. Unos minutos más tarde, en torno a las once de la mañana, llegaron los miembros de la Policía Nacional. Ni los Bomberos ni el 061 fueron avisados.
El retén del servicio de extinción de incendios que permanecía apostado en la rotonda cercana al apeadero se marchó transcurrida una hora desde la llamada al ser requerido por el Parque Central de Bomberos. El dispositivo quedó desmantelado a las once y media de la mañana y a la una de la tarde se reunieron los distintos servicios implicados en la estación de Santa Justa para evaluar los resultados.
El Sindicato Profesional de Policía Municipal de España (Sppme) en Sevilla ha denunciado en numerosas ocasiones las deficiencias del 112 y ha solicitado que la Policía Local vuelva a contar con el antiguo 092, que gestionó los avisos ciudadanos hasta el mes de octubre de 2004. El presidente de esta central sindical, que representa a más del 90 por ciento de la plantilla sevillana, Manuel Bustelo, puso en conocimiento de la Fiscalía los fallos del sistema y advertía de un posible delito de omisión del deber de perseguir delitos por parte de los responsables de seguridad de la administración local. La fiscal jefe, María José Segarra, respondió al sindicato asegurando que no veía indicios de delito en la gestión del 112, aunque sí detecto "disfunciones".
02/04/2006
FERNANDO PÉREZ ÁVILA
© Diario de Sevilla
El servicio de emergencias 112 tardó 14 minutos en avisar a la Policía Local en un simulacro de atentado terrorista en el apeadero de Renfe junto al Hospital Virgen del Rocío el pasado día 22 de febrero. Los agentes de la fuerza municipal de seguridad recibieron el aviso a las 10.53 de esta jornada, mientras que la llamada realizada por los operarios de Renfe –cuya delegación de Protección Civil y Seguridad organizaba el simulacro– consta en la sala del 112 a las 10.39, según un informe de la Policía Local al que ha tenido acceso este periódico.
La Policía Nacional llegó al lugar del simulacro en torno a las once de la mañana y no acudieron unidades ni de los Bomberos ni los técnicos de emergencias sanitarias del 061. Finalmente fueron los trabajadores de Renfe los que inspeccionaron las vías férreas y desalojaron el apeadero, ante la tardanza del resto de los servicios.
Los responsables de los distintos cuerpos de seguridad y de emergencias habían sido avisados días antes de la celebración del simulacro, que consistía en la supuesta colocación de una bomba en los aseos del apeadero. La hora en la que se detectaría el artefacto sería las 10.15 y era conocida de antemano por el personal que participaría en el simulacro. De ahí que la Policía Local y los Bomberos esperaran el aviso desde un punto muy próximo, la glorieta de entrada a la avenida Manuel Fal Conde.
El trabajo de la fuerza municipal de seguridad en este dispositivo se limitaría a la presencia en la zona de un único patrullero, que se dedicaría a estudiar los cortes de tráfico en los accesos a la estación ferroviaria y que orientaría al resto de unidades que serían enviadas en caso de que la amenaza fuera cierta. El simulacro serviría además para evaluar la rapidez de respuesta entre la recepción de la llamada y la llegada al lugar de los hechos por parte de los policías.
El personal de seguridad de Renfe efectuó la llamada al teléfono de emergencias de la Junta 112 –que gestiona los avisos a la Policía Local desde hace año y medio– a las 10.39. Sin embargo, la sala de la Policía Local no recibió el aviso del 112 hasta 14 minutos después. Los agentes de este cuerpo fueron además los primeros en llegar al escenario del simulacro. Unos minutos más tarde, en torno a las once de la mañana, llegaron los miembros de la Policía Nacional. Ni los Bomberos ni el 061 fueron avisados.
El retén del servicio de extinción de incendios que permanecía apostado en la rotonda cercana al apeadero se marchó transcurrida una hora desde la llamada al ser requerido por el Parque Central de Bomberos. El dispositivo quedó desmantelado a las once y media de la mañana y a la una de la tarde se reunieron los distintos servicios implicados en la estación de Santa Justa para evaluar los resultados.
El Sindicato Profesional de Policía Municipal de España (Sppme) en Sevilla ha denunciado en numerosas ocasiones las deficiencias del 112 y ha solicitado que la Policía Local vuelva a contar con el antiguo 092, que gestionó los avisos ciudadanos hasta el mes de octubre de 2004. El presidente de esta central sindical, que representa a más del 90 por ciento de la plantilla sevillana, Manuel Bustelo, puso en conocimiento de la Fiscalía los fallos del sistema y advertía de un posible delito de omisión del deber de perseguir delitos por parte de los responsables de seguridad de la administración local. La fiscal jefe, María José Segarra, respondió al sindicato asegurando que no veía indicios de delito en la gestión del 112, aunque sí detecto "disfunciones".
