A I P C
e-mergencista experimentado
La mayoría de nosotros aprendemos casi al inicio de nuestra formación como "profesionales de la emergencia extrahospitalaria" a evaluar correctamente la escena en la que trabajamos, pues es una pieza fundamental en la atención a urgencias. Incluso ahora, como instructor de academia de paramédicos, procuro hacer énfasis en dicho tema pues de eso ocupa gran parte de la seguridad de los paramédicos a los que capacito.
Ahora, quiero exponer una anécdota curiosa que me sucedió no hace mucho tiempo, si me permiten:
Hace unos días viajaba en mi auto particular por las calles de la ciudad de México (acueducto de Guadalupe, en GAM, para los que conocen), cuando al dar la vuelta en una esquina me encontré la siguiente escena:
Las luces de una patrulla de policía llamaron mi atención, a lo que observé que a unos cuantos metros adelante, estaban dos oficiales de la policía capitalina agachados en torno a un hombre que estaba acostado en el pavimento en posición prona. A un lado de ellos, un vehículo tipo sedán atravesado a la mitad de la calle con las cuatro puertas abiertas de par en par. Para variar, una buena cantidad de curiosos que sólo entorpecían las labores de los oficiales.
De inmediato pensé: "A este tipo lo acaban de atropellar. Mejor voy a ayudar a los policías mientras llega la ambulancia".
Así que de inmediato estacioné el auto unos metros adelante mientras las luces intermitentes amarillas hacían su trabajo (conforme marca el protocolo para estacionar vehículos de emergencia).
Saqué los botiquines que usualmente llevo en la cajuela y me aproximé a los oficiales.. ¡¡Cual fué mi sorpresa cuando el más feo de los dos me ordenó con voz ronca que me alejara de ahí!!
Enseguida rectifiqué mi posición respecto al escenario y noté que ambos policías estaban desarmando al sujeto de una pistola que me pareció ser .45
Él mismo, -el sujeto al que pretendí ayudar sólo por que lo ví tirado en el piso- intentó robar a mano armada el vehículo que supuse lo había atropellado.
Resulta de suma importancia entonces evaluar correctamente la escena en la que vamos a trabajar. No me canso de repetirlo en las academias, y aún así me fué a suceder en la calle!!
Ahora, quiero exponer una anécdota curiosa que me sucedió no hace mucho tiempo, si me permiten:
Hace unos días viajaba en mi auto particular por las calles de la ciudad de México (acueducto de Guadalupe, en GAM, para los que conocen), cuando al dar la vuelta en una esquina me encontré la siguiente escena:
Las luces de una patrulla de policía llamaron mi atención, a lo que observé que a unos cuantos metros adelante, estaban dos oficiales de la policía capitalina agachados en torno a un hombre que estaba acostado en el pavimento en posición prona. A un lado de ellos, un vehículo tipo sedán atravesado a la mitad de la calle con las cuatro puertas abiertas de par en par. Para variar, una buena cantidad de curiosos que sólo entorpecían las labores de los oficiales.
De inmediato pensé: "A este tipo lo acaban de atropellar. Mejor voy a ayudar a los policías mientras llega la ambulancia".
Así que de inmediato estacioné el auto unos metros adelante mientras las luces intermitentes amarillas hacían su trabajo (conforme marca el protocolo para estacionar vehículos de emergencia).
Saqué los botiquines que usualmente llevo en la cajuela y me aproximé a los oficiales.. ¡¡Cual fué mi sorpresa cuando el más feo de los dos me ordenó con voz ronca que me alejara de ahí!!
Enseguida rectifiqué mi posición respecto al escenario y noté que ambos policías estaban desarmando al sujeto de una pistola que me pareció ser .45
Él mismo, -el sujeto al que pretendí ayudar sólo por que lo ví tirado en el piso- intentó robar a mano armada el vehículo que supuse lo había atropellado.
Resulta de suma importancia entonces evaluar correctamente la escena en la que vamos a trabajar. No me canso de repetirlo en las academias, y aún así me fué a suceder en la calle!!