polvora_PC
e-mergencista experimentado
El Servicio descartó que fuera una emergencia
13.04/12:00 Un hombre, con iniciales A.L.G., de 53 años de edad, fue hallado muerto la madrugada del lunes al martes en su vivienda, después de llamar tres veces durantes tres horas y media antes al Servicio de Emergencia Sanitarias del 061 por haber tenido un desvanecimiento y encontrarse mal.
Así, la Policía Local fue avisada por los servicios sanitarios, que finalmente acudieron a la vivienda, aunque fueron los bomberos los que tuvieron que entrar en el domicilio por el piso superior, según confirmaron fuentes policiales, quienes dijeron que al parecer el hombre acababa de morir.
La víctima llamó por primera vez al 061 a las 20.36 horas del lunes para pedir asistencia médica y contó que había sufrido un desvanecimiento, según la información publicada por el 'Diario Sur'. Al preguntarle por su historial clínico, explicó que padecía una enfermedad pulmonar crónica, aunque nadie acudió a su casa hasta las 00.15 horas, pese a que avisó dos veces más.
En esa primera llamada, el hombre, que se encontraba solo, relató que ya se había recuperado del mareo, pero que sentía debilidad al levantarse y una especie de hormigueo en las piernas.
El aviso, según el rotativo, no se clasificó como emergencia, puesto que el enfermo hablaba con "voz entera" y los antecedentes de su enfermedad no hacían sospechar que se tratara de una urgencia vital, según fuentes del 061. No obstante, tras esta llamada se planificó que le atendiera el Servicio Especial de Urgencias (SEU).
La víctima llamó hasta dos veces más, a las 21.32 y a las 23.49 horas, para advertir de que no había ido ningún médico a verle, de que seguía solo y de que apenas le quedaba batería en el móvil.
En ese momento, según fuentes del servicio de emergencias, el paciente estaba consciente y hablaba por teléfono con normalidad, lo que alejó la sospecha de asfixia.
Los familiares del fallecido no entienden por qué se demoró tanto la atención médica. "No comprendo cómo se puede valorar una enfermedad en la distancia, y más aún conociendo su historial. Ha tenido que ir al menos seis veces al hospital en el último año, algunas de ellas en ambulancia", comenta un cuñado del difunto.
13.04/12:00 Un hombre, con iniciales A.L.G., de 53 años de edad, fue hallado muerto la madrugada del lunes al martes en su vivienda, después de llamar tres veces durantes tres horas y media antes al Servicio de Emergencia Sanitarias del 061 por haber tenido un desvanecimiento y encontrarse mal.
Así, la Policía Local fue avisada por los servicios sanitarios, que finalmente acudieron a la vivienda, aunque fueron los bomberos los que tuvieron que entrar en el domicilio por el piso superior, según confirmaron fuentes policiales, quienes dijeron que al parecer el hombre acababa de morir.
La víctima llamó por primera vez al 061 a las 20.36 horas del lunes para pedir asistencia médica y contó que había sufrido un desvanecimiento, según la información publicada por el 'Diario Sur'. Al preguntarle por su historial clínico, explicó que padecía una enfermedad pulmonar crónica, aunque nadie acudió a su casa hasta las 00.15 horas, pese a que avisó dos veces más.
En esa primera llamada, el hombre, que se encontraba solo, relató que ya se había recuperado del mareo, pero que sentía debilidad al levantarse y una especie de hormigueo en las piernas.
El aviso, según el rotativo, no se clasificó como emergencia, puesto que el enfermo hablaba con "voz entera" y los antecedentes de su enfermedad no hacían sospechar que se tratara de una urgencia vital, según fuentes del 061. No obstante, tras esta llamada se planificó que le atendiera el Servicio Especial de Urgencias (SEU).
La víctima llamó hasta dos veces más, a las 21.32 y a las 23.49 horas, para advertir de que no había ido ningún médico a verle, de que seguía solo y de que apenas le quedaba batería en el móvil.
En ese momento, según fuentes del servicio de emergencias, el paciente estaba consciente y hablaba por teléfono con normalidad, lo que alejó la sospecha de asfixia.
Los familiares del fallecido no entienden por qué se demoró tanto la atención médica. "No comprendo cómo se puede valorar una enfermedad en la distancia, y más aún conociendo su historial. Ha tenido que ir al menos seis veces al hospital en el último año, algunas de ellas en ambulancia", comenta un cuñado del difunto.