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e-mergencista experimentado
El incendio en un garaje de Zaragoza obliga a desalojar a 200 vecinos
ZARAGOZA.- Un incendio que se produjo en torno a las 2:30 horas de madrugada en un garaje de la calle Pascual Albero Burillo, de Zaragoza, obligó a desalojar a doscientos vecinos a causa del denso humo que se generó, aunque todos los evacuados pudieron volver a sus domicilios.
Fuentes de los Bomberos de Zaragoza explicaron que la extinción de las llamas, que calcinaron "completamente" cuatro vehículos aparcados en el garaje y afectaron a otros, se prolongó durante aproximadamente una hora y media, aunque la intervención de los bomberos en el inmueble no concluyó hasta las 06:00 horas.
Las citadas fuentes indicaron que la "enorme cantidad de humo" que se generó en el incendio ascendió por las cajas de las escaleras al estar abiertas las puertas de los vestíbulos de independencia, que tienen necesariamente que permanecer cerradas para evitar este tipo de sucesos.
Así, el humo ascendió hasta los rellanos de las viviendas y se introdujo en las casas de cinco patios, que comparten garaje -los de los números 18 y 20 y 21, 23 y 25- en la citada calle, situada junto al Parque Bruil, detrás del Centro Deportivo Municipal Alberto Maestro, en una zona de reciente urbanización y viviendas nuevas.
Por ello, hubo que evacuar a unos doscientos vecinos, que permanecieron en la calle hasta que los bomberos sofocaron las llamas y, sobre todo, ventilaron los inmuebles para que pudieran volver a ser ocupados.
A las 6:00 horas, aproximadamente, los bomberos habían comprobado que todo estaba en orden y se habían asegurado de que en ninguna vivienda persistía el humo, por lo que acompañaron a todos los vecinos de vuelta a sus casas.
La Policía Científica investiga en estos momentos las posibles causas del incendio.
Desde el Parque de Bomberos inciden en la necesidad de que en este tipo de edificios nuevos, que cuentan con todas las medidas antiincendios, éstas se utilicen correctamente para que no suceda lo que ha ocurrido en esta comunidad de vecinos.
Las puertas de los vestíbulos de independencia, preceptivos en todos los garajes, estaban abiertas, lo que facilitó en gran medida la propagación del humo por los rellanos porque la caja de la escalera actuó como una chimenea.
ZARAGOZA.- Un incendio que se produjo en torno a las 2:30 horas de madrugada en un garaje de la calle Pascual Albero Burillo, de Zaragoza, obligó a desalojar a doscientos vecinos a causa del denso humo que se generó, aunque todos los evacuados pudieron volver a sus domicilios.
Fuentes de los Bomberos de Zaragoza explicaron que la extinción de las llamas, que calcinaron "completamente" cuatro vehículos aparcados en el garaje y afectaron a otros, se prolongó durante aproximadamente una hora y media, aunque la intervención de los bomberos en el inmueble no concluyó hasta las 06:00 horas.
Las citadas fuentes indicaron que la "enorme cantidad de humo" que se generó en el incendio ascendió por las cajas de las escaleras al estar abiertas las puertas de los vestíbulos de independencia, que tienen necesariamente que permanecer cerradas para evitar este tipo de sucesos.
Así, el humo ascendió hasta los rellanos de las viviendas y se introdujo en las casas de cinco patios, que comparten garaje -los de los números 18 y 20 y 21, 23 y 25- en la citada calle, situada junto al Parque Bruil, detrás del Centro Deportivo Municipal Alberto Maestro, en una zona de reciente urbanización y viviendas nuevas.
Por ello, hubo que evacuar a unos doscientos vecinos, que permanecieron en la calle hasta que los bomberos sofocaron las llamas y, sobre todo, ventilaron los inmuebles para que pudieran volver a ser ocupados.
A las 6:00 horas, aproximadamente, los bomberos habían comprobado que todo estaba en orden y se habían asegurado de que en ninguna vivienda persistía el humo, por lo que acompañaron a todos los vecinos de vuelta a sus casas.
La Policía Científica investiga en estos momentos las posibles causas del incendio.
Desde el Parque de Bomberos inciden en la necesidad de que en este tipo de edificios nuevos, que cuentan con todas las medidas antiincendios, éstas se utilicen correctamente para que no suceda lo que ha ocurrido en esta comunidad de vecinos.
Las puertas de los vestíbulos de independencia, preceptivos en todos los garajes, estaban abiertas, lo que facilitó en gran medida la propagación del humo por los rellanos porque la caja de la escalera actuó como una chimenea.