Conductas suicidas y bajas psiquiátricas en la guardia civil.
FUENTE: PSIQUIATRIA.COM. 2005 ENE
La UNIÓN PROFESIONAL DE GUARDIAS CIVILES –UPGC-, asociación NACIONAL, PLURAL e INDEPENDIENTE de Guardias Civiles en situación de activo, que agrupa todas las escalas y empleos, con relación a las CONDUCTAS SUICIDAS Y BAJAS PSIQUIÁTRICAS DE LA GUARDIA CIVIL pone en conocimiento de los destinatarios citados, lo siguiente:
PRIMERO. Ante el alarmante número de suicidios que año tras año se producen en el colectivo de la Guardia Civil, especialmente en la escala de cabos y guardia civiles, cuya tasa -según algunos estudios- la cifran en 27 por 100.000 habitantes, similar a la de los países donde más personas se quintan la vida como Finlandia y Japón, el director General de la Guardia Civil, general Carlos Gómez Arruche, en septiembre de 2004 presentó un PLAN DE PREVENCIÓN DE CONDUCTAS SUICIDAS, que tenía prevista su puesta en marcha el 1 de enero de 2005.
SEGUNDO. Las Acciones a realizar por el Plan presentado por el Director General nombrado por el PSOE se centraban en:
·Creación del Equipo Especialista en conductas suicidas ·Evaluación del riesgo de conducta suicida en pruebas de selección de personal ·Revisar los planes de estudio para aumentar contenidos sobre habilidades sociales, comunicación, persuasión, aserción, empatía y autocontrol ·Divulgar información a los agentes y sus familiares a través de conferencias, página web de la Intranet de la Guardia Civil o campañas divulgativas ·Evaluaciones periódicas y apoyo al personal en situación de riesgo ·Atención psicológica confidencial y “no oficial” a los afectados, sus compañeros y familiares ·Teléfono de atención psicológica ·Seguimiento, estudio, valoración y apoyo en las unidades que hayan registrado algún caso de suicidio.
TERCERO. En el Colegio de Guardias Jóvenes “Duque de Ahumada”, en el Aula “Reina Sofía”, a las 09,30 horas del próximo día 27 de los corrientes, se va a celebrar una reunión del Consejo Asesor de Personal –que por cierto esta Asociación ignora a quién representa este Órgano, ya que en las últimas elecciones el índice de participación no llegó al 1%-, entre cuyos puntos del día que se citan, están:
3). Intervención de los jefes de, los grupos de trabajo sobre prevención de conductas suicidas y sobre conciliación de la vida familiar y laboral, para exponer las conclusiones a las que han llegado.
4). Creación de un grupo de trabajo para el estudio de la problemática ocasionada por las bajas psicológicas del personal del Cuerpo.
CUARTO. Con independencia de las conclusiones que presenten estos grupos de trabajo, la UNIÓN PROFESIONAL DE GUARDIAS CIVILES tras solicitar información a psiquiatras que tratan a guardias civiles por patologías psiquiátricas, todos ellos han informado y coincidido en un hecho:
Con independencia de otros factores (síndrome del quemado - bour nout-; mobbing -acoso psicológico laboral -; factores sociales, culturales o físicos de la persona; inexistencia de un cuadro de enfermedades profesionales; etc.) el Régimen Militar en la Guardia Civil es el principal detonante de las conductas suicidas y bajas psiquiátricas, pues lo objetivo y que no se puede obviar es el hecho que las bajas por motivos psiquiátricos en la Guardia Civil rompen las estadísticas. Son 300 veces superiores a las del Cuerpo Nacional de Policía, cuando se trata de un Cuerpo Policial con similares funciones y cuya única diferencia esta en su naturaleza civil.
QUINTO. Además desde la UNIÓN PROFESIONAL DE GUARDIAS CIVILES, entendemos que: El Ministerio del Interior y la Dirección General de la Guardia Civil, pese a la gravedad del asunto, que supone una importante merma de recursos humanos –al margen de otros dramas personales, familiares, etc.- y un importante gasto para el Erario; no están por la labor de averiguar las causas que originan esta pandemia que azota al Instituto. Para determinar la génesis de estas patologías debe impulsarse la creación de de equipos multidisciplinares formados por especialistas en psiquiatría, psicología, salud laboral, representantes del Ministerio del Interior, Dirección General de la Guardia Civil, partidos políticos y de las Asociaciones de la Guardia Civil, puesto que la importancia del problema lo requiere. Los psicólogos de la Guardia Civil, en su mayoría guardias civiles de la escala básica, son utilizados para evaluaciones del personal de baja por motivos psiquiátricos e información a la cadena de mando, en vez de proporcionar terapias psicológicas tendentes a la recuperación de estos agentes. Pese a encontrarnos ante un problema psiquiátrico, pues no se contempla la baja por problemas psicológicos, sino siempre por patologías psiquiátricas; la Guardia Civil no dispone de psiquiatras para diagnosticar, aplicar los tratamientos y hacer un control de la evolución de los pacientes, teniendo los guardias civiles afectados que recurrir a el diagnostico y tratamiento por psiquiatras particulares, para que posteriormente sean los Tribunales Médicos Militares quienes decidan la idoneidad del enfermo para el desempeño del su actividad profesional; dándose en ocasiones casos en que los Tribunales Médicos desestiman las recomendaciones de los propios facultativos médicos que los atienden. En el siglo XXI, es una incongruencia que un cuerpo policial como es la Guardia Civil, los agentes se sometan a los criterios en materia de sanidad a los Tribunales Médicos Militares, cuando estamos ante dos problemáticas de salud laboral indiscutiblemente opuestas: la militar y la policial. La falta de una normativa acorde a la realidad del Cuerpo, esta generando algunos casos esperpénticos como es el hecho que en algunos dictámenes de los Tribunales Militares estén poniendo la “muletilla” APTO PARA EL SERVICIO CON LIMITACIONES (NO PODRÁ PORTAR ARMAS, REALIZAR SERVICIOS NOCTURNOS Y CONDUCIR VEHÍCULOS). Por consiguiente, esta afirmación evidencia de una forma palpable que el guardia civil presenta una patología psiquiátrica y, que el hecho de portar armas es un riesgo potencial para su persona o para el resto de componentes. Desde esta asociación nos preguntamos… ¿Asumirá su responsabilidad el psiquiatra militar que en un momento dado, a éste guardia civil que le ha dado apto con limitaciones como las expuestas arrebate el arma a un compañero y dispare contra sí mismo o contra otros compañeros u, otras personas que estén en dependencias policiales o en su entorno?, pues debemos tener en cuenta que los guardias civiles que prestan servicios con estos compañeros, como no podría ser de otra forma por la legislación vigente, ignoran su situación médica. Para más abundamiento en este caos en materia sanitaria, la Guardia Civil no dispone reglamentariamente de puestos de trabajo que contemplen estas circunstancias, siendo los responsables de sanidad de las Comandancias los que están realizando informes discrecionales con el fin de justificar un puesto de trabajo compatible, que son muchas en las ocasiones que los agentes son trasladados a otras Unidades fuera de su provincia, agravando aún más el problema. Por poner un ejemplo, se han dado casos de que un guardia civil que ha sufrido un infarto de miocardio y tras pasar Tribunal Médico Militar, le han dado dictaminado APTO CON LIMITACIONES sino destinado a otra Comandancia y perdiendo su destino. Igualmente, en los informes médicos periciales del Tribunal Médico Militar, nunca se consigna si se trata de proceso por enfermedad común o accidente laboral.
SEXTO. Aprovechamos el asunto del presente comunicado para informar al Gobierno y Director General de la Guardia Civil, que cuando mantenga reuniones con algunos directivos de asociaciones de la Guardia Civil que manifiestan representar al colectivo se informe si estos son guardias civiles en situación de activo, o por el contrario han dejado de serlo, tras causar baja en el cuerpo por razones psiquiátricas.
FUENTE: PSIQUIATRIA.COM. 2005 ENE
La UNIÓN PROFESIONAL DE GUARDIAS CIVILES –UPGC-, asociación NACIONAL, PLURAL e INDEPENDIENTE de Guardias Civiles en situación de activo, que agrupa todas las escalas y empleos, con relación a las CONDUCTAS SUICIDAS Y BAJAS PSIQUIÁTRICAS DE LA GUARDIA CIVIL pone en conocimiento de los destinatarios citados, lo siguiente:
PRIMERO. Ante el alarmante número de suicidios que año tras año se producen en el colectivo de la Guardia Civil, especialmente en la escala de cabos y guardia civiles, cuya tasa -según algunos estudios- la cifran en 27 por 100.000 habitantes, similar a la de los países donde más personas se quintan la vida como Finlandia y Japón, el director General de la Guardia Civil, general Carlos Gómez Arruche, en septiembre de 2004 presentó un PLAN DE PREVENCIÓN DE CONDUCTAS SUICIDAS, que tenía prevista su puesta en marcha el 1 de enero de 2005.
SEGUNDO. Las Acciones a realizar por el Plan presentado por el Director General nombrado por el PSOE se centraban en:
·Creación del Equipo Especialista en conductas suicidas ·Evaluación del riesgo de conducta suicida en pruebas de selección de personal ·Revisar los planes de estudio para aumentar contenidos sobre habilidades sociales, comunicación, persuasión, aserción, empatía y autocontrol ·Divulgar información a los agentes y sus familiares a través de conferencias, página web de la Intranet de la Guardia Civil o campañas divulgativas ·Evaluaciones periódicas y apoyo al personal en situación de riesgo ·Atención psicológica confidencial y “no oficial” a los afectados, sus compañeros y familiares ·Teléfono de atención psicológica ·Seguimiento, estudio, valoración y apoyo en las unidades que hayan registrado algún caso de suicidio.
TERCERO. En el Colegio de Guardias Jóvenes “Duque de Ahumada”, en el Aula “Reina Sofía”, a las 09,30 horas del próximo día 27 de los corrientes, se va a celebrar una reunión del Consejo Asesor de Personal –que por cierto esta Asociación ignora a quién representa este Órgano, ya que en las últimas elecciones el índice de participación no llegó al 1%-, entre cuyos puntos del día que se citan, están:
3). Intervención de los jefes de, los grupos de trabajo sobre prevención de conductas suicidas y sobre conciliación de la vida familiar y laboral, para exponer las conclusiones a las que han llegado.
4). Creación de un grupo de trabajo para el estudio de la problemática ocasionada por las bajas psicológicas del personal del Cuerpo.
CUARTO. Con independencia de las conclusiones que presenten estos grupos de trabajo, la UNIÓN PROFESIONAL DE GUARDIAS CIVILES tras solicitar información a psiquiatras que tratan a guardias civiles por patologías psiquiátricas, todos ellos han informado y coincidido en un hecho:
Con independencia de otros factores (síndrome del quemado - bour nout-; mobbing -acoso psicológico laboral -; factores sociales, culturales o físicos de la persona; inexistencia de un cuadro de enfermedades profesionales; etc.) el Régimen Militar en la Guardia Civil es el principal detonante de las conductas suicidas y bajas psiquiátricas, pues lo objetivo y que no se puede obviar es el hecho que las bajas por motivos psiquiátricos en la Guardia Civil rompen las estadísticas. Son 300 veces superiores a las del Cuerpo Nacional de Policía, cuando se trata de un Cuerpo Policial con similares funciones y cuya única diferencia esta en su naturaleza civil.
QUINTO. Además desde la UNIÓN PROFESIONAL DE GUARDIAS CIVILES, entendemos que: El Ministerio del Interior y la Dirección General de la Guardia Civil, pese a la gravedad del asunto, que supone una importante merma de recursos humanos –al margen de otros dramas personales, familiares, etc.- y un importante gasto para el Erario; no están por la labor de averiguar las causas que originan esta pandemia que azota al Instituto. Para determinar la génesis de estas patologías debe impulsarse la creación de de equipos multidisciplinares formados por especialistas en psiquiatría, psicología, salud laboral, representantes del Ministerio del Interior, Dirección General de la Guardia Civil, partidos políticos y de las Asociaciones de la Guardia Civil, puesto que la importancia del problema lo requiere. Los psicólogos de la Guardia Civil, en su mayoría guardias civiles de la escala básica, son utilizados para evaluaciones del personal de baja por motivos psiquiátricos e información a la cadena de mando, en vez de proporcionar terapias psicológicas tendentes a la recuperación de estos agentes. Pese a encontrarnos ante un problema psiquiátrico, pues no se contempla la baja por problemas psicológicos, sino siempre por patologías psiquiátricas; la Guardia Civil no dispone de psiquiatras para diagnosticar, aplicar los tratamientos y hacer un control de la evolución de los pacientes, teniendo los guardias civiles afectados que recurrir a el diagnostico y tratamiento por psiquiatras particulares, para que posteriormente sean los Tribunales Médicos Militares quienes decidan la idoneidad del enfermo para el desempeño del su actividad profesional; dándose en ocasiones casos en que los Tribunales Médicos desestiman las recomendaciones de los propios facultativos médicos que los atienden. En el siglo XXI, es una incongruencia que un cuerpo policial como es la Guardia Civil, los agentes se sometan a los criterios en materia de sanidad a los Tribunales Médicos Militares, cuando estamos ante dos problemáticas de salud laboral indiscutiblemente opuestas: la militar y la policial. La falta de una normativa acorde a la realidad del Cuerpo, esta generando algunos casos esperpénticos como es el hecho que en algunos dictámenes de los Tribunales Militares estén poniendo la “muletilla” APTO PARA EL SERVICIO CON LIMITACIONES (NO PODRÁ PORTAR ARMAS, REALIZAR SERVICIOS NOCTURNOS Y CONDUCIR VEHÍCULOS). Por consiguiente, esta afirmación evidencia de una forma palpable que el guardia civil presenta una patología psiquiátrica y, que el hecho de portar armas es un riesgo potencial para su persona o para el resto de componentes. Desde esta asociación nos preguntamos… ¿Asumirá su responsabilidad el psiquiatra militar que en un momento dado, a éste guardia civil que le ha dado apto con limitaciones como las expuestas arrebate el arma a un compañero y dispare contra sí mismo o contra otros compañeros u, otras personas que estén en dependencias policiales o en su entorno?, pues debemos tener en cuenta que los guardias civiles que prestan servicios con estos compañeros, como no podría ser de otra forma por la legislación vigente, ignoran su situación médica. Para más abundamiento en este caos en materia sanitaria, la Guardia Civil no dispone reglamentariamente de puestos de trabajo que contemplen estas circunstancias, siendo los responsables de sanidad de las Comandancias los que están realizando informes discrecionales con el fin de justificar un puesto de trabajo compatible, que son muchas en las ocasiones que los agentes son trasladados a otras Unidades fuera de su provincia, agravando aún más el problema. Por poner un ejemplo, se han dado casos de que un guardia civil que ha sufrido un infarto de miocardio y tras pasar Tribunal Médico Militar, le han dado dictaminado APTO CON LIMITACIONES sino destinado a otra Comandancia y perdiendo su destino. Igualmente, en los informes médicos periciales del Tribunal Médico Militar, nunca se consigna si se trata de proceso por enfermedad común o accidente laboral.
SEXTO. Aprovechamos el asunto del presente comunicado para informar al Gobierno y Director General de la Guardia Civil, que cuando mantenga reuniones con algunos directivos de asociaciones de la Guardia Civil que manifiestan representar al colectivo se informe si estos son guardias civiles en situación de activo, o por el contrario han dejado de serlo, tras causar baja en el cuerpo por razones psiquiátricas.